Malos hábitos en las parejas

Algunos de estos comportamientos son:

• Individuos que bajo la justificación de confianza u honestidad maltratan verbalmente a su pareja, con palabras descalificadoras o despectivas como: «Usted no sirve para eso».
• Personas extremadamente celosas, que montan todo un espectáculo si la mesera lo miró de cierta manera, o si el compañero de trabajo la llamó por alguna razón.
• Los que llegan tarde a compromisos o, peor aún, simplemente no aparecen.
• Los que mandan a callar a su pareja, porque consideran que son mejores, más inteligentes o simplemente piensan saber más del tema y, por lo tanto, la opinión del otro no es válida.
• Individuos desconsiderados, que dejan la toalla tirada, la alcoba o el baño hechos un desastre, los zapatos desordenados y la ropa botada en el piso.
• Personas que hacen reproches a destiempo (en momentos de ajetreo, la visita de gente a la casa o en espacios públicos), en vez de tener una conversación civilizada en el hogar.
• Cualquier tipo de obsesión por un tema que logre minimizar la importancia de la pareja o de asuntos del hogar, como la obsesión por el trabajo, por algún pasatiempo u ocupación.
• Parejas que no contribuyen en la crianza y manejo de los hijos.
• Uno de los comportamientos más catastróficos es el chantaje emocional, en el que frases como «yo te di todo», «yo dejé a mi familia por ti» o «yo dejé otras oportunidades por estar contigo», generan sentimientos de culpabilidad y desbalance, pero, sobre todo, desilusión frente a una promesa no prometida.
• El hacer la vista gorda por el qué dirán, mientras se sufre en silencio maltratos o malos ratos con el único fin de mantener un estatus o un estilo de vida.

Cuando hay amor, hay palabras como compartir, hablar, llegar a acuerdos, educar, cambiar. Debemos tratar de evitar comportamientos que conviertan esas palabras en otras, como aguantar, soportar y sufrir.

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