La Spirulina fortalece el sistema inmune

Muchas gripas o enfermedades son causadas por microorganismos que mutan con el tiempo, para atacar nuestras soluciones, para oponerse a la forma que ideamos para contrarrestarlos.

Es aquí donde la Spirulina se convierte en un gran aliado. Por un lado, fortalece el sistema inmune, haciendo que el cuerpo tenga defensas en el momento en el que el microorganismo ataca; por otro, con sus principios antibacterianos y antivirales, modifica el ambiente, haciendo de este un espacio no próspero para estos microorganismos.

Virus y bacterias
Las gripas y enfermedades producidas por virus o bacterias suelen ser muy distintas, sobre todo, en su tratamiento. Las bacterias son complicadas, de rápido crecimiento, y hoy están siendo resistentes por el uso indiscriminado de antibióticos. Los virus, mucho más pequeños, tienen un crecimiento increíble, acelerado y numeroso, y no reaccionan a los antibióticos. Las gripas generadas por virus, por lo general, son de tener paciencia, de tratar los síntomas. Por estas diferencias, nuestro sistema inmune reacciona de una forma frente las enfermedades bacterianas y de otra muy distinta frente a las virales.

En este aspecto, la Spirulina es prodigiosa, porque, sin importar la vía, hace que el cuerpo disminuya la propagación de virus y bacterias. La Spirulina tiene una clorofila muy especial, con pigmentos naturales terapéuticos que no permiten que el cuerpo deje ser colonizado por estos microorganismos.

La Spirulina es un alimento que lleva ya varios años siendo estudiado, pues sus bondades son innumerables. Si revisamos las investigaciones, nos encontramos con casos de estudio maravillosos, uno de ellos habla de la Spirulina como agente de recuperación de la mucosa pulmonar y la mucosa bucal.

En estos tiempos de gripas, de cambios climáticos, es una buena noticia poder contar con un aliado tan bondadoso como la Spirulina.

Propiedad intelectual de Hilda Strauss. Todos los derechos reservados ©