Exaltación de las fuerzas naturales

Ese día se exaltan las fuerzas elementales del bien y del mal, pero ¿por qué sucede?

En el Día de San Juan, el planeta se encuentra con su aura verde esmeralda y violeta, en su estado más elevado. La vida vegetal registra su máximo estado de poder y en ningún otro momento del año plantas, elementales, genios y devas son tan conscientes del trabajo conjunto necesario entre los reinos del planeta. Por esto, en este día, si se realizan baños, ceremonias y aromas, estos son especialmente efectivos.

Ahora bien, como equilibrio a las fuerzas, se sabe que en esta fecha también se exaltan las fuerzas del mal, que buscan atacar y robar energías, y se aprovechan de seres inconscientes que no tienen idea de cierres o bendiciones. Para contrarrestar cualquier eventualidad, basta con llevar consigo el Cierre Ovalado. Si no es posible, puede encender siete (7) velas blancas, cerrarlas con la bendición y dejarlas prendidas hasta que se consuman completamente.

El 23 de junio es necesario meditar (aunque sea durante algunos minutos), entrar en comunicación con la naturaleza, impregnarnos de su poder, llenarnos de progreso con su magnetismo y curar nuestras dolencias con el poder de la naturaleza que está presente en todas partes.

Ahora, la época posterior a San Juan, se conoce como la época de las purificaciones, que incluye los meses de julio, agosto y septiembre.

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