Ha comenzado la época de la energía natural
Diciembre es un momento especial del año por muchas razones, una de ellas, porque cuando se acerca la Navidad y el fin del año las energías síquicas de las personas se desbordan.
Cuando decimos desbordarse, nos referimos a que en estos días las personas tienden a sentir emociones fuertemente, como la alegría, el amor, la sensibilidad, los recuerdos, el entusiasmo, la celebración, la luz, la generosidad, el ánimo de dar, de compartir; tantos sentimientos se acumulan y forman grandes energías síquicas.
Lo cierto es que este caudal de luz y energía positiva se ve reflejado en todo: en el ser humano, en la naturaleza, en los símbolos. Es como si se respirara en el ambiente. Las personas tienden a reunirse en familia y con amor celebran en torno a distintos símbolos, como el pesebre, el árbol y las tradiciones más arraigadas.
Afortunadamente para nuestra humanidad, vemos que el número de personas con propósito de superación está en aumento continuo. Cada vez hay más seres humanos que han sido testigos de conducir su vida de manera evolucionada, que el despertar de la conciencia es el camino.
La naturaleza nos ayuda a formar todo ese ambiente positivo, se une al poder de la mente para mostrarnos la superación en una atmósfera optimista y positiva de aromas y de luz.
No es coincidencia, ni casualidad, que a lo largo de los años y de la tradición popular se haya hablado siempre de baños de flores y aromas para esta época. Baños para alejar todo aquello que no nos ha dejado salir adelante, que nos mantiene anclados o en negativismo.
Hay una gran cantidad de testimonios de personas a quienes la vida les ha cambiado, que han prosperado, que han tomado un nuevo rumbo o cambiado su forma de ver la vida con el simple hecho de tomar un baño, de quemar un sahumerio y de hacer meditación con una velita.
Y es que no es una superstición: un sahumerio es una combinación pura de plantas y esencias, mezcladas en la medida ideal para lograr estos resultados. Son plantas que por tradición se han manejado por quienes saben de baños y aromas.
El día del baño, en especial, quienes han reportado sus testimonios han dicho que «esa noche duermo bien, quedo relajado, como despejado; se despierta mi imaginación y desaparece la sensación de miedo».
Recordemos que estos son los días especiales para hacer las secuencias de purificación e iluminación.