Las evidencias escondidas de los marcianos

Ahora, hay quienes dicen que son los terrícolas los que están analizando la tecnología de otros mundos. Esa es la intención de una veintena de militares retirados, personas que han estudiado fenómenos extraterrestres y testigos de la presencia de ovnis (objetos voladores no identificados) quienes comenzaron una intensa campaña en Estados Unidos para que el Gobierno haga pública toda la información sobre actividad extraterrestre en el planeta, por medio del denominado Proyecto de Acceso.

La iniciativa es liderada por el medico Steven Greer, quien hace 11 años fundó el Centro de Estudios de inteligencia Extraterrestre, por medio del cual se fomenta e investiga esta materia.

Siguiendo este objetivo, el doctor Greer comenzó en 1993 a reunir pruebas y testimonios de primera mano de militares y personal de Gobierno que hubiera experimentado contactos con ovnis, dentro de lo que él ha llamado “acceso público” a esta información.

Hoy, Greer tiene en su poder más de mil páginas de transcripción de testimonios sobre las actividades y contactos con ovnis, que además están en cerca de 120 horas de vídeo digital, que lo llevaron a iniciar el proyecto.

“El Proyecto de Acceso es una investigación sin ánimo de lucro que trabaja por la apertura de los hechos relacionados con ovnis e inteligencia extraterrestre, así como avanzados sistemas de energía”, explica Greer.

El objetivo es que el Congreso de Estados Unidos cite  a los funcionarios del Gobierno que tengan que ver con este material para que se haga pública esa información y por eso la campaña busca que la mayor cantidad de ciudadanos les escriba a sus congresistas para presionar la realización de estas audiencias.

La campaña empezó formalmente en Washington, con la presencia de 12 militares en retiro, ex funcionarios federales y expertos en el tema, quienes relataron sus experiencias y hablaron de la existencia de estudios gubernamentales sobre la tecnología extraterrestre.

Según Greer, este trabajo se está  desarrollando a partir de reingeniería invertida, del estudio de las naves extraterrestres que habrían sido “capturadas” por terrícolas entre 1930 y 1940.

Greer indica que en este tipo de proyectos trabajan desde los años 60, Estados Unidos y el Reino Unido, pero esta labor es tan secreta “que han escapado del seguimiento legal”.

Por ejemplo, según las investigaciones de Greer, en el espacio exterior habría formas de energía muy poderosas y silenciosas, que permitirían eliminar el uso de combustibles como el petróleo, el  gas o la gasolina, que generan polución.

Con esto se beneficiarían sectores como la agricultura, la aviación y hasta se acabarían algunas empresas de servicios públicos, pues cada hogar u oficina estaría en capacidad de generar la energía que necesite.

En este orden de ideas, mejorarían las condiciones de vida de todos los  habitantes del planeta.  “En 10 ó 20 años se reducirían significativamente las  fuentes de combustible y entonces será como en la película Mad Max, donde todo el mundo se pelea por el último barril de combustible”, dice Greer.

Y agrega:  “Una vez que haya tanta energía disponible para sectores como la aviación, la agricultura, las fábricas y la construcción, no habrá límites para la humanidad”.

La campaña pretende que un movimiento de esta naturaleza se inicie en otras potencias del mundo y que como resultado de ésta se designen delegaciones especiales de diplomáticos “que establezcan relaciones cordiales y pacíficas con los habitantes de otros mundos”.

¿Histeria colectiva o revelación científica?, la verdad permanecerá en las estrellas.