Vidas pasadas
Una de las preguntas más comunes que se plantean aquellos que dudan de la reencarnación es: «si he vivido antes, ¿por qué no me acuerdo de nada?».
Este es un problema general y, cómo todo en nuestra existencia, tiene una razón de ser.
La humanidad se encuentra en este momento en un punto coyuntural de su historia, un tiempo en el que la Era de Piscis se está acabando para dar paso a la «era de luz», la Era de Acuario, y con ella se va despertando la conciencia dormida.
En nuestro presente, observamos que las personas tienden más a la espiritualidad, que están en busca de la verdad y que desean mejorar su calidad de vida.
Dentro de pocos años, la ciencia se dará cuenta de que existen otras dimensiones y otras leyes, el pensamiento humano dará un giro de 180 grados y los grandes científicos manejarán aspectos que solo pueden concebirse hoy como especulación y charlatanería pero que el día de mañana fundamentarán los progresos tecnológicos.
Pero esto es, por ahora, un sueño lejano: la humanidad apenas está saliendo de esa época oscura trayendo de ella los sentidos superiores adormecidos, con innumerables defectos mentales, sin disciplina, sin moral, sin amor verdadero a Dios o a los demás. Es triste, pero es un proceso por el que nuestro planeta debe pasar y, afortunadamente, sucederá rápidamente.
En este momento hay cientos de seres que están alcanzando la iluminación y ya recuerdan sus encarnaciones pasadas. Con el tiempo, el número aumentará, poco a poco la humanidad se transformará y subirá un peldaño en la escalera de la evolución espiritual.
En ese momento, nuestro idioma será la verdad, los sentidos estarán despiertos y seremos almas sabias, con miles de años de experiencia, porque habremos activado los centros de la memoria.