Práctica para el Equinoccio de Primavera

El día del equinoccio (Equinoccio de Primavera 2021. Sábado 20 de marzo. Hora: 5:20 am.) consiga flores de todos los colores y frutas de todas las clases; no pase este día escaso de provisiones. Limpie toda la casa, ordene la ropa, los víveres, los muebles, aplique aceite de rosas en donde pueda; abra ventanas y permita que entre el aire fresco.

Si es posible realice una limpieza con la Reactivación Energética de Superficies Hilda Strauss®.
Elija una hora propicia y sirva el vino-agua o sólo agua en la copa, siéntese cómodamente en una silla en donde la espalda quede recta, no es aconsejable hacerla en un sillón de sala o en la cama.

Dos son las posiciones ideales, en posición de Padmasana (más conocida como posición de loto), o también (es la mejor): en un asiento de comedor, pues son altos, rectos, nivelados, no hay presión abdominal, la espalda queda recta y la cabeza erguida. La copa no debe estar llena y tiene que cogerla con las dos manos; si para usted es difícil sostenerla mientras medita, apóyela sobre una mesa, siempre y cuando sus dos manos entren en contacto con ella. Inhale y exhale profundamente varias veces (cuatro por lo menos), cierre los ojos, respire normalmente y concentre toda su atención en la copa, debe sentir una intensa comunicación entre el líquido y su energía.

Usted debe sentir que el agua o agua-vino es usted, transpórtese a la copa, deje que lo mejor de usted se identifique con el líquido, debe relajarse muy bien. Luego, concéntrese en su ser interior, imagine que en su corazón hay un templo, una casa o un recinto donde se encuentra ese ser interior que es su conciencia, es la chispa de Dios en usted, es su fracción divina, imagen y semejanza del Altísimo.

Suplique en ese momento a Él, que transfiera su energía divina a ese líquido, y vea como una luz azul intensa se transporta desde su corazón a la copa, luego lentamente beba el contenido de la copa, mientras piensa con fuerza mental proyectada;“Con este líquido lleno de energía me estoy curando de todas mis dolencias, tristezas y aflicciones, esta energía cambia mi vida y la hace positiva, hace que el progreso material y espiritual llegue a mí y a los míos, con esta energía llegará la solución a mis necesidades y la realización de mis sueños, llegarán mil oportunidades o yo llegaré fácilmente a ellas. La fuerza de mi ser está conmigo, me protege y me alimenta”. Luego inhale y exhale profundamente durante un minuto. Ya puede abrir los ojos.

El anterior es un ejercicio que practicaban los antiguos druidas con un vino especial de plantas y especias aromáticas; una vez terminaban, ofrecían todas las flores y los frutos dispuestos en los altares a su ser interno y a la divina madre naturaleza.

Meditación del Equinoccio de Primavera