¿Por qué no puede faltar Complejo B en tu organismo?
El Complejo B es un conjunto de ocho vitaminas esenciales para estructurar y reforzar el funcionamiento del sistema inmunológico y nervioso, ayudar al funcionamiento del ADN, regular el desempeño del cuerpo y la utilización de la energía, mejorar el tono muscular y prevenir diversas lesiones en la piel y en las mucosas.
Beneficios del Complejo B para el sistema inmunológico
- Niveles adecuados de ácido fólico o vitamina B9 ayudan prevenir la anemia.
- Las deficiencias de tiamina o vitamina B1, riboflavina o vitamina B2, ácido pantoténico o vitamina B5, biotina o vitamina B8 y la vitamina B12, pueden disminuir la producción de los anticuerpos.
- Las vitamina B6 participa en la formación de proteínas relevantes para el sistema inmunitario y el ADN.
Los complejos de vitaminas B están implicados en la defensa inmunitaria de diversas formas. Las vitaminas B6, B12 y B9 participan conjuntamente, entre otros, en la formación de proteínas relevantes para el sistema inmunitario y el ADN. Las vitaminas B se han relacionado especialmente con la mejora de la reacción inmune en enfermos graves.
Una administración insuficiente de vitaminas puede acarrear consecuencias negativas para el sistema inmunitario. Por ejemplo, la carencia de vitamina B1 se ha asociado a un mayor riesgo de padecer infecciones parasitarias. En el caso de una deficiencia de vitamina B6, se ha observado una merma de la inmunidad celular en personas sanas de edad avanzada. Este efecto adverso se consiguió retraer con una administración suficiente de vitamina B6.
Esta es la función principal de cada una de las vitaminas:
- Vitamina B1 (tiamina): Es indispensable para el crecimiento, desarrollo y funcionamiento de las células del organismo. Se distribuye ampliamente en los tejidos, con la concentración más alta en el hígado, el cerebro, los riñones y el corazón.
- Vitamina B2 (riboflavina): Contribuye a la generación de energía y desarrollo celular, además de prevenir los trastornos hormonales y el dolor de garganta, principalmente.
- Vitamina B3 (niacina): Se recomienda para nivelar el colesterol en la sangre. También se usa junto con otros tratamientos para los problemas de la circulación y la migraña.
- Vitamina B5 (ácido pantoténico): Mejora el funcionamiento del sistema inmune y su capacidad de reacción frente a virus y bacterias, mejora el rendimiento atlético y previene dolores de cabeza.
- Vitamina B6 (piridoxina): Evita la anemia, el riesgo de depresión y las erupciones en la piel.
- Vitamina B7 (biotina): Ayuda en el correcto funcionamiento del metabolismo, el cuidado de la piel, mantenimiento de los tejidos, la pérdida de peso y los problemas cardíacos.
- Vitamina B9 (ácido fólico): El ácido fólico es una vitamina B (folato) que sirve para prevenir la anemia megaloblástica y perniciosa, malformaciones o anomalías congénitas graves en los recién nacidos y la depresión en adultos.
- Vitamina B12 (cobalamina): Ayuda a producir glóbulos rojos, ADN, ARN, energía y tejidos, además de mantener sanas las células nerviosas.