Las baterías de Bagdad
Cuando hablamos de objetos anacrónicos descubiertos en nuestra historia, no podemos olvidar el impactante hallazgo de las baterías de Bagdad.
Cuando hablamos de objetos anacrónicos descubiertos en nuestra historia, no podemos olvidar el impactante hallazgo de las baterías de Bagdad.
En los años 30, en Irak, un grupo de trabajadores de ferrocarril encontró lo que parecía ser una tumba y en ella varios pequeños jarrones de arcilla. Lo curioso es que se encontraban rellenos de cilindros de cobre y varillas de hierro. A nadie le quedó duda: aquellos jarrones eran baterías, perfectas y funcionales, como las que inventó Volta hace más de doscientos años.
Ahora bien, luego de varios análisis, se identificó que tanto la tumba como todos los objetos que contenía datan del año 250 a.C. ¿Una pila voltaica de más de dos mil años? Esto sí que es un objeto fuera de tiempo.
Tras su descubrimiento, las pilas fueron guardadas y, posteriormente, analizadas. En 1940, se realizó un experimento sorprendente con ellas: se las llenó de sulfato de cobre y encendieron una lámpara conectándola a la batería. Nadie sospecha para qué se podrían usarse hace más de dos mil años, pero experimentos recientes han logrado dorar objetos y brillar plata con ayuda del funcionamiento de la pila.
Es probable que nunca sepamos con exactitud qué funcionalidad tendrían estas pilas, pero es un hecho que existieron y que fueron usadas en su momento.