La Nada
La Nada tiene un efecto liberador de la mente y del espíritu que puede que usted no haya considerado.
La Nada libera. Cada persona tiene sus propias preocupaciones: el ama de casa se preocupa por su hogar, el científico por su investigación, el tendero por su negocio, el artista por su obra, el músico por sus composiciones… Pero no se dan cuenta de que cada uno está absorto en el tema irreal del mundo de las formas.
La Nada nos enseña lo que no somos: no somos la casa, la investigación, la tienda, la obra o la composición. La Nada nos libera de esa preocupación y nos enfoca en el desarrollo de nuestra vida interior, que es lo verdaderamente importante. Este desarrollo es lo único que nos llevamos cuando desencarnamos, nada más.
Recordemos aquella frase lapidaria que dice: «¿Qué dejó fulano al morir?»; la respuesta es: «todo».