Sociedades secretas de la humanidad
El problema actual de las crisis de las bolsas revela en realidad una problemática mucho más profunda de nuestra humanidad: el miedo.
A pesar de la diversidad de culturas, existe un elemento transversal a todas: el miedo a perder lo propio. Y, cuanta más riqueza hay, el miedo o pánico aumenta, pues, los que más poseen, tienen miedo de perder más.
Este miedo, a pesar de ser transversal, se manifiesta de manera distinta en países primermundistas, como Estados Unidos. Allá, el miedo está más instaurado en la cultura y es altamente influenciado por los medios de comunicación.
Esta manipulación de las comunicaciones, de los fondos, y en general todo este miedo financiero, tienen detrás una «mano negra», por fuerzas oscuras que están tan perfectamente estructuradas, que nadie sabe dónde están. Son organizaciones secretas superpoderosas que no son el famoso Club Bilderberg, ni el Foro de Davos, ni el Club de Roma, ni la mesa redonda industrial europea, ni la dichosa trilateral de Rockefeller, no: son organizaciones de poder impresionante que se manifiestan cada determinado tiempo, generando algunos ciclos de ganancia para unos pocos. Son organizaciones de estadounidenses, canadienses, europeos y japoneses que mueven los hilos de la economía mundial, y, lo que es peor, los hilos del pánico mundial.
La «mano negra» se mueve organizando ciclos de ganancia, sube el precio del petróleo, luego lo baja, quiebra un banco, lo compra, lo quiebra de nuevo, lo acaba, y lo funde; mueve fuerzas laborales enormes, manipula sindicatos, producciones en Oriente que nosotros ni imaginamos, deprime el dólar, lo sube, vuelve a bajarlo, y en esas operaciones encausa capitales gigantes para beneficio de esos multimillonarios secretos del mundo entero.
Afortunadamente para el ciudadano común, esto no durará mucho, estas organizaciones tienen verdaderas amenazas en la economía mundial; se avecina la gran crisis que tiene varios ingredientes y que está creciendo rápidamente.
¿Cuáles son esos ingredientes?
- El petróleo
- El dólar
- El conflicto militar
- La polarización del mundo
Irán está en la mira, y Rusia, que ahora es capitalista, puede ubicarse al lado de la fuerza musulmana. El asunto no es fácil y las grandes manipulaciones y especulaciones de los capitalistas tendrán también un fin estruendoso.
Las organizaciones secretas, que tanta angustia han causado, vivirán los mismos temores y su fin tendrá relación con el agotamiento de los recursos naturales. Ahora bien, estas organizaciones no se han quedado con los brazos cruzados, ya tienen la mira sobre la palabra del futuro: «nuclear», una fuerza que monopolizará el poder y la economía, porque, en parte, reemplazará al petróleo.
Los mayas anunciaron el gran cambio para el 2012, y miles han considerado que se referían al fin del mundo, pero ese año llegó y pasó, y no hubo apocalipsis. ¿Esas predicciones no se estarían refiriendo más bien al inicio de la crisis petrolera?, ¿o no estarían refiriéndose al fin del orden actual del capitalismo salvaje?, ¿del reordenamiento del planeta? Es algo más posible y coherente.
El capitalismo no se acabará, pero sí se transformará, la humanidad sufrirá un reordenamiento, la «mano negra» será más pequeña y tendrá menos control, se determinarán controles grandes en las potencias.