¿Nexos con personas fallecidas?
Cuando una persona fallece, muchos de sus allegados se preguntan si queda algún nexo con el espíritu de quien muere. Lo cierto, y aunque es duro decirlo, es que depende únicamente del grado de evolución de las personas.
Cuando una persona es inconsciente, por lo general, no cae en la cuenta de la muerte, ni siquiera de los primeros sucesos de este proceso. Solo se percata de manera definitiva cuando está en la última parte del bardo, pero el alma ya ha pasado por la desaparición de la forma del ser, de la personalidad y, por lo tanto, ya ha hecho un desprendimiento mental completo de sus familiares.
En este punto, lo único que une a este ser con sus familiares es el karma. Recordemos que nosotros siempre nacemos como una oleada, siempre juntos, pues, por karma, nacemos siempre con el mismo grupo extenso de almas. En este sentido, la persona que en esta vida es mi hermana puede ser que en vidas pasadas haya sido una gran amiga, una maestra o una tía.
Cada persona tiene una misión específica, pero es una realidad que cada una de ellas también tiene una misión en un gran grupo de almas. Estos grandes grupos van migrando de país en país, dependiendo de su misión, naciendo lentamente en otras regiones o continentes.
Una persona que desencarna, es iluminada al momento de la muerte, ve a sus familiares, pero debe seguir su camino, regresar a otro cuerpo y continuar su misión.
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